¿Te quemas más en el agua?

Estamos en verano y playas y piscinas se llenan de gente con muchas ganas de divertirse y sofocar el calor. Seguro que más de una vez te has preguntado si es cierto que estar bajo el agua provoca que seas más propenso a sufrir quemaduras en la piel. Hoy te explicamos la veracidad de este dicho que cada año aparece en forma de duda entre los bañistas.

¿Te quemas más si estás dentro del agua?

En el agua, el sol quema más. La explicación a esto es que el agua hace un efecto lupa que potencia la radiación recibida por nuestra piel. La física demuestra que cuando nos encontramos dentro del agua, al igual que sucede al estar en la arena de la playa (o en la nieve en invierno), una parte de la luz se refleja en la superficie del agua (alrededor de un 20%) y la otra pasa a través de ella donde se desvía mediante una refracción de los rayos, lo que potencia la radiación que recibe nuestra piel.

Por ello, recomendamos las cremas resistentes al agua o, por contra, aplicarse protección solar cada vez que tomamos un baño en la playa o piscina. Se debe tener en cuenta que, a pesar de colocarnos cremas resistentes al agua, es necesario ponerse el protector en la piel cada vez que nos bañemos.

Además, pasados 40 minutos bajo del agua, el protector comenzará a perder cualidades, por lo que será recomendable volverse a aplicar el producto. Aprovechamos para recordar la importancia de aplicarse una crema solar adecuada según las características de tu fototipo de piel.

Cada vez son más los casos de cáncer de piel y, con ello, las personas empiezan a concienciarse de la importancia de cuidar su cuerpo ante los rayos ultravioleta. Las ideas generalizadas y mitos suponen que en muchos casos actuemos de forma equivocada, por lo que acabar con ellos nos ayudará a comprender y escuchar lo que nuestra piel reclama.

La piel tiene memoria. Sé consciente y responsable de su cuidado.

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