Cuidado facial si llevamos mascarilla

La mascarilla será el accesorio esencial del próximo verano, por lo que será necesario evaluar su impacto en la piel y repensar, o al menos adaptar, la rutina del cuidado de la piel ante este factor. También porque, bajo lo que de hecho es un conjunto de telas filtrantes, las necesidades de la piel cambian significativamente.

"El calor seco de los sistemas de calefacción deshidrata la piel, mientras que los contaminantes de los ambientes internos, los llamados VOC, oxidan los tejidos y promueven la inflamación", explica la Dra. Nathalie Broussard, directora de comunicación científica de Shiseido.

“Sin olvidar las luces azules de las PC, las computadoras portátiles y los teléfonos inteligentes: penetran en la piel y causan daños similares a los rayos UV, es decir, envejecimiento prematuro, discromía, deshidratación y daños en la función de barrera”.

Especialmente en climas cálidos como los que ocurren en verano, "el aliento permanece atrapado y crea un ambiente cálido y húmedo que puede facilitar la acumulación de sudor y sebo en la piel, que son un terreno fértil para imperfecciones, erupciones e incluso acné”, dice la Dra. Barbara Sturm, facialista favorita de muchas de las mejores modelos como Bella Hadid.

Entonces, ¿cómo cuidar la piel?

• Limpiar la piel.
• Otro paso esencial es la aplicación de un producto hidratante tanto al despertarse como antes de acostarse.
• Exfolia la piel una vez a la semana, evitando productos demasiado agresivos. La fricción con la máscara, de hecho, se traduce en una mayor sensibilidad de la piel, por lo tanto, es mejor centrarse en cosméticos delicados y en base a la vitamina C, un aliado precioso en lo que respecta a la reparación de tejidos y un arma infalible contra la relajación de la piel. Incluso en el salón es posible solicitar un tratamiento facial con vitamina C, que ayuda a reducir la discromía y aligerar la pigmentación.
• Los cosméticos a base de vitamina E también ayudan a mantener a raya el agrietamiento y el envejecimiento de la piel gracias a su capacidad para combatir los radicales libres.
• Darse regularmente una mascarilla hidratante y calmante, tanto en tela como "para untar", es particularmente adecuado después de usar dispositivos de protección durante mucho tiempo, si su objetivo es calmar las irritaciones, reducir el enrojecimiento y mimar la piel a 360 grados.

Conclusiones

“Usar una máscara no significa cuidar menos la piel, por el contrario. A medida que nos adaptamos a esta nueva normalidad, ahora es más importante que nunca prestar mucha atención a su cuidado de la piel para evitar irritaciones y erupciones cutáneas. Nuestra extensa red de expertos en belleza siempre está lista para brindar asesoramiento y poner su profesionalidad a disposición de quienes desean dedicarse a su bienestar con total seguridad" - Chiara Cassani, Gerente de Comunicaciones Senior de Treatwell Italia.