5 errores que cometemos al usar crema de protección solar

Cada vez estamos más concienciados con llevar un estilo de vida saludable y tenemos mayor preocupación por temas que pueden afectar a nuestra salud.

En #Molexplore queremos cuidar tu piel, por eso te contamos qué 5 errores cometemos a la hora de aplicarnos crema de protección solar, para poder solucionarlos y así disfrutar con tranquilidad cuando estamos al aire libre en cualquier época del año.

Usar un factor de protección no adecuado.

Tenemos tendencia a usar un fotoprotector más bajo del que necesitamos. Pensamos que así nos broncearemos antes, pero no es así. El factor indica el número de veces que el protector aumenta la capacidad de la piel de protegerse antes de quemarse. Nos pondremos morenos igual con un factor 15 que con un 50, pero nos quemaremos mucho antes con el FPS 15. Y “quemarse”, por si aún tenías dudas, ¡no es bueno!

Usar la crema del año anterior.

Este es uno de los errores más comunes. Queremos aprovechar la crema que nos sobró el año anterior, pero la protección que nos va a brindar ya no es la adecuada. Los principios activos se descomponen y pierde la eficacia. Debemos comprar crema nueva cada año.

No aplicar la crema de forma adecuada.

Normalmente todos solemos aplicarnos la crema una vez hemos llegado a la playa o hemos empezado la excursión bajo el Sol. Al hacerlo así, los primeros 30 minutos seguimos desprotegidos y nos podemos quemar con facilidad. Debemos ponernos el protector antes de salir de casa y reaplicarlo cada 2 horas. Si estamos en la playa o la piscina y entramos al agua, al salir siempre deberemos volver a ponernos.

Ponernos crema sólo cuando vamos a tomar el Sol.

En nuestro día a día la mayoría de nosotros no usamos crema de protección solar. Vamos a nuestro trabajo, a hacer la compra, al parque o a dar un paseo sin tener en cuenta que estamos bajo el Sol y que podemos quemarnos. Debemos cambiar esta rutina y convertir en un hábito el ponernos crema solar antes de salir.

Usar poca crema solar.

Aunque no siempre es así, en este caso a mayor cantidad de crema que nos pongamos, mayor protección frente a los rayos UV. Lo adecuado es usar 2 miligramos por centímetro cuadrado. Para hacernos una idea, una avellana para la cara, otra para el escote y una nuez para cada brazo, cada pierna, para la espalda y el abdomen.

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